Comparto este artículo de German Castaños que me pareció muy interesante
Beatriz
Hola Amigos:
Uno de los temas que abordaré en la charla que daré en
Colombia tiene que ver con el proceso de endiosamiento que han
experimentado las técnicas de creatividad tradicionales. Aquí unas ideas
al respecto:
No podemos a estas
nuevas generaciones seguir pidiéndoles creatividad con
técnicas del siglo XX, pensadas para un
sujeto del siglo XX, con los
conocimientos disponibles en el siglo XX.
Las técnicas en general abogan por un proceso rápido,
corto, exigente desde lo racional, desatendido desde lo
sensitivo-perceptual-
emocional. ¿Qué tipo de creatividad disruptiva podemos esperar de una
avaricia productiva en una
ansiedad temporal? Las
técnicas ponen su énfasis en el producto. Tiene que responder a las
necesidades planteadas, en el momento exigido y a un intervalo corto.
Cuando el producto es más importante que el proceso, es este quien se deteriora, deteriorando el producto final.
Cuando el proceso es respetado, valorado y cuidado las repercusiones en
el producto final se notan en ideas más divergentes, totales y
satisfactorias.
La falla más significativa quizá se deba a la
escasa transferencia que han tenido las técnicas de creatividad a la ejercitación en el día a día,
fuera de las incentivaciones corporativas, fuera de las necesidades imperiosas de un jefe.
Así, la
utilización utilitaria (la redundancia es intencional) de las técnicas de creatividad puede devenir en solo provocaciones de las llamadas
barreras emocionales que provocan
barreras de aprendizaje,
un filtro emocional que rechaza la tarea (o no logra despertar la
pasión necesaria). Vale preguntarse ¿Qué emocionalidad se despiertan en
técnicas de creatividad corticalizadas? ¿Qué emocionalidad despiertan
talleres de creatividad con
aplicación ultra utilitaria al puro rendimiento económico de la empresa? La
Psicología Humanista
da elementos para concebir a la persona como centro y promotor del
aprendizaje, no como periferia y herramienta de crecimiento
desbalanceado solo a favor de la empresa olvidándose de la trilogía
manos-corazón-pensamiento.
Las técnicas han pretendido, parafraseando a Ortega y Gasset
hacer el esfuerzo para ahorrar esfuerzo. Pues en creatividad, los esforzados caminos de la técnica no ahorran esfuerzo porque
la creatividad no permite ni atajos ni cortar camino (so
pena de ver deteriorada la producción final de la creatividad). La
creatividad tiene sus caminos y sus tiempos que, siendo respetados
ellos, la creatividad nos valorará y agasajará con su propuesta.
¿Por qué esperar a que nos convoquen a un brainstorming
si allá afuera hay una flor, un abrazo, un dolor? ¿Por qué esperar a
sentarme para ejercitar un SCAMPER si allá afuera hay un obstáculo, una
risa, un pájaro?
Teniendo 70 mil pensamientos diarios
¿necesitamos forzar pensamientos creativos extras? Claramente no estamos usufructuando esa
"masa crítica" de pensamientos. Algo estamos haciendo mal en el pensamiento de la cotidianeidad .
Si aceptamos que la vida humana se rige por la razón, la posibilidad de vivir queda destruída dijo Christopher McCandless
. Es justamente en la razón, donde parecen apalancarse las técnicas de creatividad tradicionales. Se ve necesario una integración total de la psiquis de los individuos para, en consecuencia, una creatividad total.
En las técnicas tradicionales
el individuo es el que resigna entorno, significantes, deseos, atractors. Y el cerebro lo hace, nos intenta satisfacer, pero sin gozo, sin diversión, una complacencia obligada:
evidentemente el producto sale pero forzado y sin magia.
Y así como las acciones de marketing intrusivas ya no funcionan con el
consumidor, las estrategias de creatividad intrusivas y obligadas
tampoco tienen los efectos deseados, ni buscados. Hay en el cerebro una
NO aceptación de los mismos porque carecen de algunos elementos básicos
de atracción.
Las técnicas pueden ser
productivas hacia la creatividad. Las técnicas pueden ser
destructivas para la creatividad. Todo depende del
posicionamiento que hagamos hacia ellas.